Misa Tridentina en Mar del Plata

Lugar y dia donde se reza actaulmente la Misa Tridentina en mar del Plata.

Iglesia Castrense Stella Maris, dependiente del Vicariato castrense. Base Naval mar del Plata. Todos los Domingos y Solemnidades.
Ver horarios de la Misa en el siguiente Blogs.
http://misatridentinaenmardelplata.blogspot.com.ar/ o escribir a santamisaenlatin@yahoo.com.ar

miércoles, 3 de agosto de 2016

¡Si estas enfermo! Por nada del mundo dejes esta lectura

¡Si estas enfermo! Por nada del mundo dejes esta lectura 



Pasaje de la vida de Santa Liduvina (Modelo de enfermos, Patrona de los enfermos crónicos)

   …A  pesar de esto, no vayamos a creer que Liduvina hubiese llegado ya, y menos aún que hubiese llegado sin pena y sin combate a una perfección serena y sin nublado. Los santos no son de otra naturaleza que la nuestra, y ¡Dios sea por ello alabado! ¡Pues si nos apareciesen siempre como seres sobrehumanos extraños a todas nuestras debilidades: y si no los viésemos más que en el deslumbrante y lejano esplendor de una santidad consumada, desde luego quién sin sentirse anonadado, querría detenerse sólo en el pensamiento de elevarse hasta ellos! Nosotros necesitamos pues mirarlos de cerca, y contemplarlos marchando por nuestro mismo sendero, con nuestras mismas miserias y nuestros mismos desfallecimientos; y entonces, al ver sus luchas, al oír sus gemidos, y al tocar sus llagas, santamente entusiasmados nos decimos. ¡Nosotros también caminamos con ellos! Su debilidad entonces forma nuestra fortaleza; y sus imperfecciones nos alientan a imitar sus virtudes.Liduvina pagó también su tributo a la humanidad.

   Al principio de sus pruebas le costó excesivo trabajo dominarse, y más de una vez su paciencia se desmintió. Algunas veces sufría unos fuertes accesos de tristeza y desaliento, y sentía crueles desolaciones. Un día, por ejemplo, desde su lecho oyó ruido de risas en el exterior, pues unas jóvenes casi en su puerta se entregaban a una ruidosa alegría, que le hizo mal, pues la imaginación le representó inmediatamente el doloroso estado en que ella se hallaba. ¡Ah! Díjose a sí misma, para mí no hay diversiones ni gozosas risas, para mí no hay esperanza de curación, mañana, y pasado mañana, siempre durará mi padecer hasta el sepulcro y el aislamiento y el olvido sobre todo. Y se puso a llorar con tal abundancia y amargura que partía el corazón; y otras muchas veces se puso a llorar del mismo modo.

   Esas desolaciones duraron los cuatro primeros años de su enfermedad. Sin duda cuando se renovaban acudirían cerca de ella su padre o su anciana madre que con toda la ternura de su corazón ensayaban consolarla; otras veces venían algunas de sus amigas menos olvidadizas y más caritativas, o algunos vecinos y parientes y le decían cuanto podían para alentarla y hacerle olvidar sus dolores; mas nadie lo podía conseguir.

   Muchas veces lejos de aliviarla los consuelos le eran pesados, porque los puramente humanos no pueden curar ni aliviar nuestros males. Liduvina se afligía siempre, y muchas veces se le oía en la fuerza de su angustia mezclar con los sollozos las quejas más lamentables. ¡Dios mío! exclamaba con acento desgarrador: Dios mío; ¿por qué no tenéis compasión de mí? Mis días y mis años son puros lamentos: mi vida no es más que una horrorosa muerte que se prolonga esto es ya mucho padecer, y soy muy desgraciada. ¡Quién es castigado y humillado como yo! ¡Dios mío! poned fin a vuestros rigores, o a lo menos por ¿qué no me ayudáis?

   Esos cuatro años fueron harto difíciles, pues eran como el ensayo del martirio, o el noviciado del dolor.

   Mas el día de las verdaderas consolaciones estaba cerca; Liduvina iba en fin a escuchar la palabra que embalsama todos los sufrimientos y los hace suaves y gloriosos; iba a unirse a Dios sólo, con Dios toda entera y sin reserva, mas con una unión tan estrecha como no la había conocido hasta entonces; desde ahora Dios iba a hablarle al corazón y con santas y sobreabundantes delicias, se disponía a recompensar a su fiel y amada sierva.

   Un día vino un sacerdote a visitar a Liduvina, y este santo eclesiástico, era uno de esos sacerdotes animados del espíritu de Dios a quien una tierna caridad abrasa y a quien las lágrimas y la desgracia atraen, como se dice que los cantos lastimeros atraen a ciertas aves del cielo, una de esas almas que Dios saca de sus tesoros y que parece haber formado de los esplendores de su bondad para darles la más dulce y gloriosa de las misiones sobre la tierra: la de consolar.

   En presencia de Liduvina, y a la primera ojeada el hombre de Dios profundamente compadecido, había sondeado la inmensidad de su infortunio; mas lleno de experiencia, también había comprendido lo que faltaba a esta alma escogida, y lo que podía realzar su belleza: “Hija mía, le dijo con paternal dulzura; vuestros males son inauditos; todos ciertamente os compadecen y se contristan al veros; mas ¿sabéis lo que yo pienso?  ¿Vos, padre mío? respondió Liduvina asombrada, vos que sois bueno sin duda como todos, pensáis que tengo mucho porque compadecerme. —Pues bien, desengañaos, le dijo, yo estoy lejos de hablar y de pensar como el mundo, yo pienso, al contrario que sois bienaventurada —Cómo, exclamó Liduvina, presa de una visible emoción: yo bienaventurada! yo clavada en este lecho y para siempre quebrantada por el dolor en todos mis miembros. —Sí, vos, vos misma. ¡Ah! sin duda, hija mía, yo más que nadie compadezco vuestros crueles sufrimientos. Más veo en vos el alma cristiana, a la amante y a la esposa de Jesucristo; y he aquí por qué, cuanto más horribles son vuestros males más me creo con derecho para deciros que sois bienaventurada ¡Ah! sí, vos lo sabéis el padecer cristianamente, hija mía, es el cristianismo, es el Evangelio entero: porque ésta es la fe que adora, es la esperanza que espera y se regocija, éste es el amor que se inmola. O más bien, éste es Jesucristo mismo que viene a vos, que os toma, y os pone en una cruz para que le seáis semejante, y queriendo hacer resplandecer en vos todas las magnificencias del alma, os perfecciona en alguna manera por el dolor, como el artífice perfecciona con el cincel la obra maestra que ha soñado su genio. Por el sufrimiento os purifica de las menores manchas del pasado, protege y glorifica lo presente y lo venidero, y os da como un nuevo bautismo de inocencia, adornando vuestra frente con todas las glorias de la virtud y abriéndoos las puertas del cielo.

   ¡Ah! ¡Padre mío! dijo Liduvina, ya lo comprendo: tenéis razón al llamarme bienaventurada; mas el sufrir no es bastante, como lo habéis dicho, sino que es necesario sufrir cristianamente, sufrir con sumisión y con paciencia, y aun padecer con amor; y lo que me desconsuela, es que no puedo lograrlo.


Entonces el santo sacerdote habló de la pasión del divino Maestro, y se expresó con su fe y su corazón, haciendo resaltar sus inefables ejemplos, y sus lecciones sublimes, concluyendo que había querido tocar el tema para recomendar su frecuente meditación a Liduvina, le dijo el sacerdote, he aquí lo que necesitáis, he aquí lo que os hace falta, si queréis llegar a la paciencia y glorificar vuestros dolores, meditad la adorable pasión de Jesús: meditadla muchas veces, y aun casi sin cesar, y éste será el medio todopoderoso para alcanzar la perfección en el padecer.

   Después de esta conversación, Liduvina se sintió más alentada, y se dedicó a la meditación. Más cuál no fué su decepción este ejercicio que tanto le había alabado parecióle insípido y casi imposible, y por despecho a poco tiempo lo dejó. En cambio volvió a sus lamentos y a sus quejas; sus lágrimas volvieron a correr; dichosamente el piadoso sacerdote no tardó en volver. ¿Y bien, le dijo, mi remedio ha producido su efecto? —No, padre mío, respondió con franqueza. Es tal vez cosa muy buena la meditación para los que la saben hacerla, en cuanto a mí no entiendo nada de ella. Quiero ocuparme de los padecimientos de Jesucristo y vuelvo siempre a meditar los míos, y los encuentro tan insoportables, que los de mi buen Maestro me mueven muy poco. —Y así, replicó vivamente el sacerdote,  ¿vais a primera vista a dejaros abatir?  ¿Mas no sabéis acaso que no hay aquí en la tierra ninguna empresa que no cueste pena ni dificultad de la cual no triunfe una constante voluntad? ¿No es necesario quebrar la corteza antes de comer el fruto? ¿Acaso al primer golpe de la vara hizo Moisés salir el agua de la roca? — Más, padre mío, añadió la pobre enferma: ¿cómo pues queréis vos que yo proceda? ¿Me será posible meditar entre los tormentos que sufro, y con las lágrimas que me arrancan incesantemente esos tormentos? — Sí Liduvina, sí, os lo digo ensayadlo, perseverad, y os lo aseguro, que bien pronto vuestras lágrimas se secarán, y contemplando los dolores de Jesús, no sentiréis más los vuestros no echareis de menos lo que lloráis tan amargamente, la salud, la juventud y la hermosura, todos esos goces de la vida que se han volado para hacer lugar al sufrimiento no apreciareis ni amareis entonces más que a Jesús crucificado.

   ¡Ah! cuando le viereis tan pobre, él a quien le pertenecen los cielos y la tierra, sin amigos, sin honores y sin consuelo, abandonado y ultrajado; tan pobre que sólo tiene un madero por lecho de muerte, y sólo hiel para endulzar su agonía, ¿podréis vos contristaros por vuestros abandonos y vuestras privaciones? Hija mía. Jesús que es la eterna hermosura, tan bueno y tan amable, cuando le viereis cubierto de horribles llagas, la frente desgarrada con una corona de espinas, los ojos apagados con la sangre, los labios acardenalados, el pecho abierto, los pies y las manos como preso del dolor con enormes clavos, cuando le viereis obedeciendo no solamente a Dios su Padre que le oprime, más a los jueces inicuos que le condena a los soldados que le mofan, a los verdugos que le torturan, al pueblo que le maldice, obedeciendo bajo el azote, la púrpura, las bofetadas y las salivas, sin resistencia, sin murmuración, sin quejas, obediente hasta la muerte, y muerte de cruz ¡ah! ¿Nada os dirá Jesús en este estado? al verlo así ¿No os sentiréis conmover? ¿No comenzareis a olvidaros a vos misma?

   Y sobre todo, Liduvina, cuando habréis comprendido por la meditación la palabra que explica esos tormentos, esa muerte, la palabra inefable: ¡Yo os amo! Cuando habréis oído que el Salvador desde la cruz os dice al corazón: “Mírame a mí, tu Dios, yo el eterno, heme aquí delante de tí agonizante y espirando por tí, tan sólo porque te amo” ¡Ah! ¿Creéis que vuestro corazón resistirá a tanto amor? Vos, Liduvina, amareis a Jesús con toda vuestra alma, y entonces en él y por él, como San Pablo y como todos los santos, amareis vuestras enfermedades, vuestras llagas y todos vuestros padecimientos, y encontrareis la gloria y la felicidad en el padecer. Así, os lo repito otra vez, ¡meditad!

   Desde ese día Liduvina se mostró seriamente generosa, y la cruz fué su libro a todas horas, y el calvario su escuela de cada día. Así, muy pronto aprendió de Jesús el alfabeto de la ciencia de los santos. Llegó el tiempo pascual: una mañana su pobre alcoba se revistió del aire de fiesta. El buen sacerdote iba a volver, mas esta vez no venía sólo, sino que Dios venía con él. Todos estaban de rodillas, y Liduvina crucificada adoraba con fervor. Cuando el Salvador entró, le dijo el sacerdote con indecible emoción, mostrándole en sus manos la blanca y divina Hostia: Liduvina, hasta ahora sólo os he hablado de los dolores y del amor del buen Maestro, mas hoy y en este instante él mismo en persona viene a enseñaros. Es el que tanto ha padecido y amado, el crucificado del amor, y es quien viene ahora a visitaros, a consolaros en vuestro lecho de angustia, y a amaros hasta unirse con vos. ¡Ah! abridle bien vuestra sima, escuchad bien la voz de su amor, y él os dirá que si permanecéis y morís con él y como él en la cruz, muy pronto como él y con él resucitareis para la gloria.” Y al punto el sacerdote dióle la adorable Hostia. ¿Qué había pasada entonces? ¿Qué había dicho Jesús al corazón de la virgen? porque Liduvina al mismo instante había prorrumpido en sollozos; lloró y casi no hizo más que llorar por muchos días. Dichosa crucificada esta vez lloraba de amor y de felicidad.

   Cumplido estaba, la gracia había triunfado; Liduvina se hizo en poco tiempo una amante apasionada de Dios en la cruz. De día y de noche, a todo instante no veía más que a Jesús. El día pasaba pronto; las noches no le eran bastante largas, y tantas delicias así encontraba en ocuparse de su crucificado Jesús; cumplido estaba, no más desolaciones ni quejas. Su estado, es cierto iba empeorando: la corrupción y los gusanos, y los tormentos se multiplicaban. . . más qué le importaba ya. A la corrupción, a los tormentos y a los gusanos los llamaba su alegría, y llegaba hasta pedirle a Dios que se multiplicasen todavía más. ¿No quisierais ser curada? le preguntaban —No, no, respondía siempre; aunque no fuese necesario sino una Ave María para obtener este milagro, me guardaría bien de no rezarla con este fin. ¡Ah! no, ¡el no padecer con mi Jesús,  sería el más duro penar!

   Dios sea bendito. Los dolores de la tierra, así como las olas del océano, pierden su amargura a medida que van subiendo hacia el cielo.


“VIDA DE SANTA LIDUVINA”

Fuente: http://sanmiguelarcangel-cor-ar.blogspot.com.ar/




miércoles, 15 de junio de 2016

Misa Tridentina en Mar del Plata Junio 2016 Oratorio Nuestra Señora del Pilar Jujuy 375



Se hace llegar la invitación al rezo de la Santa Misa Tridentina, a todas las personas de Mar del Plata y la zona, 
que el dia Viernes 17/6/2016 a las 19hs en punto, Sábado 18/6/2016, a las 19hs y Domingo 19/6/2016 a las 11 hs Santa Misa Cantada .
 En el Oratorio de Nuestra Señora del Pilar FSSPX. Calle Jujuy 375. Barrio La Perla Mar del Plata.
 Rezara la Misa el Reverendo Pater Ezequiel Rubio. Media hora antes de la Misa se rezara el Santo Rosario y se harán confesiones. Saludos a todos en Cristo Rey y Maria Reina.
Las Misas Tridentinas en la Base no se rezan mas pues nuestro Capellas el Reverendo Pater Jorge Rotella fue transladado subitamente a Puerto Belgrano. Agradecemos a el todo lo que nos brindo durante estos años y a los Padres de la Fraternidad Sacerdotal San Pio X, que nos acompañan desde el año 2005 con una regularidad absoluta y una fidelidad sin limites a la Santa Misa de siempre y a la Tradición Católica. Jose Luis Ventrice.

sábado, 26 de marzo de 2016

Felices Pascuas año del Señor 2016

Queridos hermanos y hermanas en Cristo Rey y Maria, les deseo a todos ustedes unas muy Felices Pascuas!

Christus Vincit, Christus Regnat, Christus imperat





REGINA COELI 


Regína caeli, laetáre; allelúia.
R. Quia quem meruísti portáre; allelúia.
V. Resurréxit sicut dixit;; allelúia.
R. Ora pro nobis Deum; allelúia.
V. Gáude et laetáte, Virgo Maria; allelúia.
R: Quia surréxit Dóminus vere; allelúia.
Orémus
Deus, qui per resurréctionem Fílii tui Dómini nostri
Iesu Christi mundum laetificáre dignátus es,
praesta quáesumus, ut per ejus Genetrícem
Vírginem Maríam, perpétuae capiámus gáudia vitae.
Per eúmdem Christum Dominum nostrum.
Amen.

V. Alégrate, Reina del cielo; aleluya.
R. Porque el que mereciste llevar en tu seno; aleluya.
V. Ha resucitado, según predijo; aleluya.
R. Ruega por nosotros a Dios; aleluya.
V. Gózate y alégrate, Virgen María; aleluya.
R. Porque ha resucitado Dios verdaderamente; aleluya.
Oración
Oh Dios que por la resurrección de tu Hijo, nuestro Señor Jesucristo, te has dignado dar la alegría al mundo, concédenos que por su Madre, la Virgen María, alcancemos el gozo de la vida eterna. Por el mismo Jesucristo Nuestro Señor.
R. Amén.

Pidamos al Señor y a nuestra Madre la Reina del Cielo por:

La vocación a la vida religiosa del hermano Julio Cesar.

Pro Oratorio FSSPX Mar del Plata


viernes, 25 de marzo de 2016

Queda suspendida a partir de Marzo de 2016 la Misa Tridentina en Mar del Plata por falta de Capellán.

Hoy después de 10 años consecutivos, se ha rezado la ultima Misa Tridentina, en Mar del Plata. La ultima misa, primero se comenzo en el Convento Dominico de San Martín de Porres, luego pasamos al Divino Rostro por decreto de Monseñor Puiggari, luego del traslado de nuestro buen Capella el Pater Fray M. OP. No ponemos nombres para que el clero decadente de esta ciudad y su Obispo, sigan riendo y burlándose de nosotros un grupo de fieles estable desde el 2007 hasta hoy 2016. Una pena muy grande para nosotros, que el Pater Capllen de la Base Naval Jorge fuera trasladado, seguramente a instigación de nuestro querido Obispo y muchos de sus clérigos... Alguno de ellos con dudoso prontuario... Dios los juzgue a cada uno de ellos... Y sea aplicado para todos los enemigos de la Misa la Bula Quo Primo Tempore de San Pio V...este Misal justamente ahora publicado por Nos, nada se le añada, quite o cambie en ningún momento y en esta forma Nos lo decretamos y Nos lo ordenamos a PERPETUIDAD, bajo pena de nuestra indignación, en virtud de nuestra constitución, Nos hemos decidido para el conjunto y para cada una de las iglesias enumeradas arriba, ... que ellos deberán, en virtud de la santa obediencia, abandonar en el futuro y enteramente todos los otros principios y ritos, por antiguos que sean, provenientes de otros misales, los cuales han tenido el hábito de usar, y cantar o decir la Misa según el rito, la manera y la regla que Nos enseñemos por este Misal y que ellos no podrán permitirse añadir, en la celebración de la Misa, otras ceremonias ni recitar otras oraciones que las contenidas en el Misal. Y aún, por las, disposiciones de la presente y en nombre de nuestra Autoridad Apostólica, Nos concedemos y acordamos que este mismo Misal podrá ser seguido en la totalidad en la Misa cantada o leída en todas las iglesias, sin ningún escrúpulo de conciencia y sin incurrir en ningún castigo, condenación o censura y que podrá válidamente usarse, libre y lícitamente y ESTO A PERPETUIDAD (etiam perpetuo). Y de una manera análoga, Nos hemos decidido y declaramos que los Superiores, Administradores, Canónigos, Capellanes y otros Sacerdotes o religiosos de una Orden cualquiera, no pueden ser obligados a celebrar la Misa de otra manera diferente a como Nos la hemos fijado y que JAMÁS NADIE, quienquiera que sea podrá contradecirles o FORZARLES A CAMBIAR DE MISAL o anular la presente instrucción o a modificarla, sino que ella estará siempre en vigor y válida con toda fuerza, no obstante las decisiones anteriores y las Constituciones Generales o Especiales emanadas de Concilios Provinciales o Generales, ni tampoco el uso de las iglesias antes mencionadas, confirmadas por una regla muy antigua e inmemorial, ni las decisiones ni las costumbres contrarias cualesquiera que sean.
Nos queremos, al contrario, y Nos lo decretamos con la misma autoridad, que después de la publicación de la presente constitución así como del Misal, TODOS LOS SACERDOTES que estén presentes en la Curia Romana están obligados a cantar o a decir Misa según este Misal, dentro de un mes...
...QUE ABSOLUTAMENTE NADIE, POR CONSIGUIENTE, PUEDA ANULAR ESTA PAGINA QUE EXPRESA NUESTRO PERMISO, NUESTRA DECISIÓN, NUESTRA ORDEN, NUESTRO MANDAMIENTO, NUESTRO PRECEPTO, NUESTRA CONCESIÓN, NUESTRO INDULTO, NUESTRA DECLARACIÓN, NUESTRO DECRETO, NUESTRA PROHIBICIÓN, NI OSE TEMERARIAMENTE IR EN CONTRA DE ESTAS DISPOSICIONES. SI, A PESAR DE ELLO, ALGUIEN SE PERMITIESE UNA TAL ALTERACIÓN, SEPA QUE INCURRE EN LA INDIGNACIÓN DE DIOS TODOPODEROSO Y SUS BIENAVENTURADOS APÓSTOLES PEDRO Y PABLO.
Dado en Roma, año 1570, quinto de nuestro pontificado. Cristo rey y Maria Reina les apliquen a todos los que lucharon por la disolución de esta Misa, en Mar del Plata, la sentencia de San Pio V- Dios sea con nosotros. Quede claro a los que se mofan que llegara el tiempo en que lloraran ante el tribunal incorruptible de Dios y tambien que les quede claro que no hemos quedado desamparados...

sábado, 4 de abril de 2015

Porque si creemos que Jesús murió y que resucitó, de la misma manera Dios llevará consigo a quienes murieron en Jesús.


 
Juan 5,24 En verdad, en verdad os digo: el que escucha mi Palabra y cree en el que me ha enviado, tiene vida eterna y no incurre en juicio, sino que ha pasado de la muerte a la vida.
Juan 6,54 El que come mi carne y bebe mi sangre, tiene vida eterna, y yo le resucitaré el último día.
 Juan 5,29 y saldrán los que hayan hecho el bien para una resurrección de vida, y los que hayan hecho el mal, para una resurrección de juicio.

Tesalonicenses 4,16 El Señor mismo, a la orden dada por la voz de un arcángel y por la trompeta de Dios, bajará del cielo, y los que murieron en Cristo resucitarán en primer lugar. Después nosotros, los que vivamos, los que quedemos, seremos arrebatados en nubes, junto con ellos, al encuentro  del Señor en los aires. Y así estaremos siempre con el Señor.

!Queridos Hermanos y hermanas en Cristo Rey y Maria Reina, tengan Ustedes unas muy Felices Pascuas!

Misa Tridentina en Mar del Plata, todos los Domingos del presente año 11.15hs. (5.4.2015)

viernes, 27 de marzo de 2015

Misa Tridentina en Mar del Plata Horarios Semana Santa 2015

Horarios Santa Misa Semana Santa 2015
 

Se los invita a rezar la Santa Misa en la Capilla Castrense Stella Maris Base Naval Mar del Plata

Domingo de Ramos. Rito Tridentino. 11.30hs
Jueves Santo Rito Romano Ordinario. Horario 19hs.
Viernes Santo. Adoración de la Cruz. Rito Romano Ordinario. Horario. 15 Hs.
Sábado Santo. Rito Romano Ordinario. Santa Misa de Vigilia. Horario 19.00 hs.
Domingo de Pascua. Santa Misa Rito Romano Tridentino. Horario 11.30 hs.

Resto del presente Año Litúrgico Horario de Misa Rito Romano Tridentino, todos los Domingos. Horario Habitual 11.30 hs.
Los saludamos en Cristo Rey y María Reina.




sábado, 7 de febrero de 2015

Misa Tridentina en Mar del Plata a partir del 8 de Febrero de 2015.



Santa Misa Tridentina en Mar del Plata.
Horarios 2015 a partir del Domingo 8 de Febrero. A las 11 hs. Iglesia Stella Maris Base Naval Mar del Plata. De 11 a 11.15 confesiones. Rezo del Santo Rosario. 11.30 Inicio de la Santa Misa. Los esperamos a todos a partir de las 11 Hs. Saludos a Ustedes en Cristo Rey y Maria Reina. JL Ventrice. Mar del Plata. Cualquier pregunta escribir un e mail a la siguiente direccion j_ventrice@yahoo.com